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English

Although the earliest evidence of Christian worship in Asturias date from the 5th century, evangelisation did not make any substantial progress until the middle of the 6th century, when hermits like Turibius of Liébana and monks of the Saint Fructuoso order gradually settled in the lands of the Cantabrian mountains and began preaching the Christian doctrine to the locals.

Spanish

Aunque los primeros testimonios cristianos de Asturias datan del siglo V la verdadera progresión del cristianismo en Asturias sólo tuvo lugar a partir de mediados del siglo VI, cuando toda una serie de anacoretas, como Santo Toribio de Liébana y otros monjes pertenecientes a la orden de San Fructuoso de Braga, se fueron asentando en territorios de la cordillera Cantábrica e iniciaron la predicación de la doctrina cristiana entre los lugareños.